
Pertenecer a la familia más rica de Portugal implica, para Paula Amorim, una gran responsabilidad: la de cuidar y expandir el legado empresarial que logró Américo, su padre. «Los negocios es lo que más me gusta del mundo», asegura mientras compartimos una pizza en la casa familiar de Oporto, entre camelias, azulejos y árboles centenarios. ¿Su último reto? Acaba de presentar en España su marca de moda Paula. Leer


