
Un piso en una finca de los años 30 se ha convertido en una casa fresca y luminosa, llena de guiños ingeniosos para reconvertir los espacios y darles un toque funcional y divertido, con una clara inspiración vintage. En definitiva, una buena muestra de que con imaginación y creatividad se pueden crear espacios realmente sugerentes y llenos de personalidad. Así es la casa de la interiorista Gabriela Conde. Leer


